Entrevista realizada en 1976 para el periódico “Diario de Castilla”
por Paulino González Bermejo.
Se puede observar a un maestro volcado absolutamente con
su alumnado para que destacáramos en diversos ámbitos del deporte
a nivel provincial y regional

Entrevista con don Rufino Martín, un trabajador del deporte

A 14 km de Segovia se encuentra enclavado Valsaín, un pueblo con cerca de 1000 habitantes y gran tradición deportiva. Sin embargo, se encuentra prácticamente paralizado en cuanto a actividades deportivas se refiere.

Todo esto es debido quizás a las grandes controversias que desde hace ya muchos años viene recibiendo en el complejo campo deportivo, a pesar de los esfuerzos realizados contra viento y marea por los maestros del grupo escolar, como Dª. Nieves Matesanz y D. Rufino Martin entre otros, y este último verdadero motor y organizador de cuantas actividades deportivas con que Valsaín ha podido contar.

Pero hagamos un poco de historia, y para ello hemos entrevistado a la persona que hemos creído más idónea, D. Rufino Martín, maestro nacional de las Escuelas Mixtas de Valsain, y que lleva ejerciendo dicho cargo desde hace 11 años.

—Don Rufino, a nivel escolar, ¿qué nos puede decir en cuanto a la actividad deportiva se refiere, desde que usted lleva ejerciendo como maestro nacional en Valsaín?

—Con mi incorporación al grupo escolar de Valsaín en 1965, y al igual que en otras materias de enseñanza, yo tenía asignada la preparación física de todos los chicos, e inmediatamente, y dado que existía una gran afición al fútbol, logramos conjuntar un magnífico equipo que consiguió ganar varias copas al entonces equipo de San Ildefonso cuando aún estaba de director D. Antonio Aragoneses. Seguidamente y dada nuestra situación geográfica, estuvimos durante 4 o 5 años subiendo al Puerto de Navacerrada a practicar el deporte de esquí. Existía una gran pega y es que no encontrábamos medios de transporte para desplazarnos hasta el Puerto, teniendo que subir en mi coche particular seis, siete y hasta ocho chicos; encontrando, eso sí, muchas facilidades por parte de Pepe Arias y hermanos, quienes nos cedían todo el material necesario para la práctica de este deporte.

Al mismo tiempo y conjuntándonos con los deportes antes citados, participábamos en baloncesto y en ajedrez, obteniendo muy buenos resultados en el primero de ellos, a pesar de los pocos chicos que tenía disponibles.

—¿Cómo encuentra el deporte en la actualidad y con qué instalaciones cuentan ustedes?

—Este año no participamos en competiciones oficiales, no por esto hemos olvidado el deporte, practicando durante el recreo escolar principalmente baloncesto, fútbol y ping-pong. En cuanto a instalaciones se refiere, seguimos con las primitivas porterías de baloncesto, y el año pasado nos concedió la Delegación Provincial unas porterías portátiles formidables. Dentro del gimnasio tenemos lo indispensable: plinto, potro, varias colchonetas algún que otro saltómetro.

—Todo esto a nivel escolar ¿Y la juventud y los que no son ya tan jóvenes no hacen deporte?

—Los jóvenes que les gusta y quieren al deporte fichan por lo general con Vicasa- La Granja, al que pertenecen con ficha este año tres en edad escolar y cinco mayores. Como sigue habiendo mucha afición por el esquí, bastantes chicos siguen subiendo a practicar ya por su cuenta, y contamos con algunos un poco más mayorcitos convertidos en verdaderos profesionales que en la actualidad ejercen como monitores en las diversas estaciones invernales con que cuenta la provincia.

—¿Qué proyectos tiene para el futuro?

—A consecuencia de falta de terreno propio por parte del Ayuntamiento, no se pueden hacer grandes proyectos, pues el suelo es del Patrimonio Nacional y nuestro mismo Grupo Escolar se quedó sin terminar. D. Ramón Andrada, arquitecto del citado Patrimonio, nos trajo el plano de un frontón para los escolares que iba ubicado en el paredón del comedor, las pistas de los campos asfaltadas y el vallado de los patios sin terminar; pero aún no hemos perdido la esperanza de que algún día veamos todo esto hecho una realidad. Mientras tanto, mis compañeras de enseñanza y yo seguimos haciendo lo que buenamente podemos en pro de los chavales, trabajado duro para que en años venideros podamos participar en alguna de las competiciones oficiales. Aprovechando este pequeño paréntesis, me he dedicado a seguir con aprovechamiento un curso de preparador provincial de baloncesto.

—Nada más don Rufino, muchas gracias por su amabilidad y que todos sus proyectos se vean realizados y puedan disfrutar de ellos como ustedes se merecen.