Crónicas Gabarreras 19
 Crónicas gabarreras:   Inicio > Artistas > El lobo y el pastor (Francisco Martín Trilla).  


Los llanos de Majambrienta
fueron únicos testigos
de una historia que se cuenta
entre viejos enemigos.

Le llamaban Solitario,
solo en el monte vivía,
un pastor legendario
que con poco subsistía.

En la Chabola de Aranguez,
el ermitaño dormía,
allí calmaba su hambre
y sus enseres tenía.

La luna llena de enero
los llanos iluminaba,
y los hielos traicioneros
una sombra reflejaban.

Sus ovejas alocadas
no dejaban de correr,
estaban acobardadas;
el hombre se acercó a ver.

En un saliente rocoso,
por encima del corral,
vigilaba sigiloso
un prodigioso animal.

con astucia y sutileza,
el lobo al hombre acechaba,
le miraba con fijeza,
pero al pastor no atacaba.

Con rapidez y destreza,
echó mano a su fusil,
apuntando en la cabeza
a su odiada fiera vil.

Se quedaron frente a frente,
mas ninguno reaccionaba;
desde luego, era evidente,
la vida se perdonaban.

“¡Si aprecias tu pellejo,
aquí no te quiero ver!”
Al lobo le dijo el viejo,
que pareció comprender.

Un aullido lastimero
resonó en la noche clara,
emprendió trote ligero,
se iba de Peñalara.

Quizás los dos comprendían
que sus mundos se acababan,
rivales ya no serían,
por eso se perdonaban;
poco a poco se extinguían,
pues en la sierra estorbaban.

Francisco Martín Trilla.


©Pedro de la Peña García | cronicasgabarreras.com