Crónicas Gabarreras 13
 Crónicas gabarreras:   Inicio > Anécdotas y Curiosidades > ¡Que comience la función! (Esteban Ramírez)  


Caricatura: Juan José Martín Encinas (2001)

Primer acto: El despertar de las Historias.

¡Es la hora! Bajo una luz tenue la mesa está limpia. Unas cuantas tazas blancas, cucharillas y pequeñas bolsas de azúcar se distribuyen por los sitios ocupados y, en el centro, la tabla de madera espera pacientemente que la cafetera se pose sobre su superficie para trasmitirla, posiblemente, el calor más agradable del mundo. Velozmente los vahos del café se adueñan de cada rincón del salón y se introducen con suavidad por las vías respiratorias de los presentes ¡Este es el momento! El placentero y hechizante aroma del café despierta los recuerdos y los pone a disposición de todos. Historias pasadas que se transforman en anécdotas eternas ¡Es la hora!

Entre sorbo y sorbo padre nos deleita con sucesos y chascarrillos acontecidos en el pueblo, unas veces como protagonista, otras como observador; pero la mayoría como producto de trasmisión de una generación anterior. Infinidad de anécdotas propias y ajenas que transcurren a lo largo de todas las estaciones del año; pero, si hay que escoger un momento concreto que sirva como marco de referencia, sin duda alguna las extraordinarias Fiestas de Valsaín representan el ambiente idílico para revivir los hechos.

La última sobremesa acontecida en el seno de mi familia regaló auténticos momentos de la historia del pueblo: desde los corros que se formaban alrededor de Quique Aparicio, pasando por el puesto de melones y sandías de los curros, se recordó la trayectoria dominada por Los Piratas (especialistas en trastadas) para terminar con sus discípulos, la quinta del Pavo. Esta última y conocida promoción cuenta con un historial de anécdotas abrumador: representaciones acontecidas en el palco de los músicos que parodiaban el transcurrir diario en los bares del pueblo y las peculiares características de sus gentes; cómicas imitaciones de la Orquesta Mondragón, o como en mitad del baile, la banda encargada de amenizar la noche se veía obligada a hacer una pausa para dar paso a un hombre con micrófono y un atractivo repertorio de chistes.

Otras anécdotas que recuerda padre con un brillo especial en los ojos son la transformación que sufrió en “Gigantona”, junto con Millán, aquellas fiestas en las que estaban ausentes, o cuando José Ignacio, Millán y Bebi salían de en Ca´Agapito con los bolsillos llenos de cangrejos guisados en unos pantalones que intuimos que en sus orígenes fueron blancos ¡Qué poco se necesitaba para disfrutar! ¡Qué grandes se hacían los actos pequeños en Valsaín!

Foto: David Martín

Segundo acto: Tiempos presentes.

Las historias en la actualidad no son como las de antaño. Es un hecho que hay que asumir. Aun así, me permito narrar las siguientes:

En 2015 un grupo de amigos recordamos las grandes actuaciones humorísticas protagonizadas por Oscar, Millán, José Ignacio, Chirivias, los Juanjos, Molina, Chichas, mi padre y un amplio etcétera que no puedo presentar aquí, pero de los que recordaremos siempre sus historias personales. En ese camino de evocar los días dorados de nuestros ídolos fiesteros, decidimos disfrazarnos de Reinas y Damas y subir al pregón. Allí sucedieron muchas cosas. Recuerdo las fotos que nos hicimos alegremente con las Reinas y Damas (sin duda las verdaderas protagonistas de las fiestas), con el Alcalde y el Equipo Directivo, a Rodrigo desmelenado gritando a los cuatro vientos el mítico Vecinos y Vecinas, Ciudadanos y Ciudadanas de Valsaín. También recuerdo como otros se preguntaron extrañados quién era la mujer del vestido negro y la imponente barba (el inesperado Abelín) o las palabras de una confusa niña al preguntar a su madre que por qué son tan feas esas chicas. No sé si hicimos o no lo correcto. Lo que sé es que nosotros lo pasamos en grande y creo que fue una sensación que se notaba también en el rostro de los espectadores. Al año siguiente, Rodri, Abelín, Angelillo y yo intentamos hacer una función parecida con tres “Shakiras”, Carlos Vives, dos bicicletas y un carrito con una enorme goma de borrar de la marca MILAN. Comprensiblemente, no nos permitieron subir al escenario pero este hecho no fue motivo para venirse abajo y abandonar la representación. Tras finalizar el pregón dimos vueltas por la plaza divirtiendo a todos aquellos que querían ofrecer una bonita sonrisa al pueblo de Valsaín.

¿Y 2017? No, no creo que 2017 sorprenda con representaciones de este estilo. Los tiempos han cambiado ¿No creéis?

Aunque quién sabe… Hay veces que no está de más hacer un poco el gamberro, o sinó preguntad al hombre de la gabardina y la maleta que opina al respecto.

Foto: Crónicas Gabarreras

Tercer acto: La despedida.

Aquí se recoge una pequeñísima parte de las historias que conozco. Ahora os toca a vosotros rememorar vuestras propias experiencias. Por último, si lo consideráis oportuno finalizaré el escrito con el siguiente consejo (¡¡¡Y si no lo consideráis oportuno lo anotaré igualmente que para eso soy yo el que está escribiendo el artículo!!!):

“Degustad en sobremesa un buen café y escuchad. Escuchad las historias de los vuestros, escuchad las historias del pueblo pues, sé que cada uno de los que leéis hoy este apartado, tenéis muchas historias que contar e infinitas por escuchar. Las risas están aseguradas, y una parte del recuerdo de aquellas gentes que han protagonizado cada una de las anécdotas nacidas en Valsaín volará satisfecha generación tras generación.

Señores y Señoras, Damas y Caballeros, Niños y Niñas.

¡QUE COMIENCE LA FUNCIÓN!

Foto: Angelines García

Mención especial a José Ignacio y Millán, dos hombres con espíritu imperecedero en Valsaín.

 

Esteban Ramírez.


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