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 Crónicas gabarreras:   Inicio >  Crónicas de la Historia >  Lo que pudo haber sido y lo que es (Luis Peinador Valdenebro).  


Estado del Palacio en el último cuarto del siglo XVIII. Dibujo: Luis Peinador

En el siglo XV, en tiempos de la monarquía castellana de los Trastámara, el Rey Enrique III, monarca amante de la actividad cinegética, mandó construir un pabellón de caza situado en un solar cercano a un río. Este lugar fue llamado "La Casa del Bosque" y sobre él se levantó un palacio sin un plan fijo: "El Palacio de Valsaín".

Posteriormente, el rey Felipe II, de la Casa de los Austrias, monarca que con orgullo decía que en su reino nunca se ponía el sol, eligió este palacio como residencia de la Corte en multitud de ocasiones. En sus prolongadas estancias, disfrutó de paseos, de la caza y de momentos muy gratos con su esposa Isabel de Valois, acompañado muchas veces por visitantes ilustres: Don Juan de Austria, el Príncipe Don Carlos, los Príncipes de Bohemia, la Princesa Doña Juana...

El día 12 de agosto de 1566, la Reina Isabel de Valois dio a luz en este tranquilo lugar a Isabel Clara Eugenia, siendo bautizada días más tarde en la Capilla de este Palacio por el Arzobispo de Rossano, nuncio del Papa y que con el tiempo sería elegido Papa con el nombre de Urbano VII. (La pila bautismal actualmente se encuentra en la nueva Iglesia de la Virgen del Rosario).

Con motivo del nuevo matrimonio de Felipe II con Ana de Austria, la Princesa Doña Juana se trasladó un mes antes a este Real Sitio para los preparativos de la boda. Los festejos se celebraron en Segovia y Valsaín.

El Rey, que en este lugar respiraba paz, continuo !levando a su familia hasta los últimos años de su vida. Dada la frecuencia de estas visitas, estuvo interesado en instalar aquí su Corte, pero cambió de opinión y definitivamente la instala en El Escorial. Se supone que los motivos para tomar esta decisión fueron: Por un lado, que en esta vertiente de la Sierra había demasiados Monasterios, y por otro, que el clima era más duro. "Nace el Monasterio de El Escorial".

Murió Felipe II y la vida cortesana de sus sucesores se desenvolvía más en El Escorial y en El Pardo, pasando el Palacio de Valsaín a un segundo plano, pero sin olvidarse de él.

En las sucesivas visitas de los Reyes Felipe My Felipe IV, se hicieron reparaciones y mejoras, pero fue Carlos II, el último monarca de los Austrias, el que más lo utilizó. Precisamente en una de estas visitas se produjo un incendio, año 1686, en el que el Palacio sufrió graves daños.

Al morir Carlos II sin descendencia, es sucedido por Felipe V, éste fue proclamado Primer Rey de la Monarquía de los Borbones después de una Guerra sucesoria.

El deseo de tener "un Versalles" en Castilla le lleva a este nuevo monarca al Palacio de Valsaín, donde reside algunas temporadas mostrando interés en reconstruirlo, pero abandonó este proyecto en favor de un nuevo Palacio con un estilo muy distinto al de los Austrias.

En el año 1719. en una zona cercana, decide comprar a los Monjes Jerónimos del Parral una hospedería que contaba además con una ermita, dos huertas y un frondoso prado. Dos años des­ pués, 1721, bajo la dirección de Teodoro Ardemans, comienzan las obras de lo que sería el Palacio del Real Sitio de San Ildefonso.

En el Palacio de Valsaín se establecieron talleres donde se labraban las estatuas de mármol y de fundición para la construcción del nuevo Palacio. La instalación de estos talleres supuso un progresivo e imparable deterioro del Palacio y, por extensión, de sus jardines, que se fueron desfigurando.

El siglo XIX, ya construido y terminado el Palacio de La Granja, supuso para el de Valsaín el total olvido. El edificio se dejó a su suerte, derrumbándose paulatinamente hasta nuestros días.

¡QUÉ PENA LO QUE PUDO HABER SIDO, Y LO QUE ES!

Luis Peinador Valdenebro.


©Pedro de la Peña García | cronicasgabarreras.com