Valsaín, como todo pueblo, tiene su historia. Una historia de muchos años, hecha de acontecimientos de todo tipo, unos alegres y otros tristes, unos ya olvidados y otros inolvidables.

Valsaín tuvo su origen como "real sitió". Se remonta a los siglos XIV y XV, a los reinados de Enrique III y Enrique IV. Ambos monarcas acudían con bastante frecuencia a cacerías en las laderas de lo que hoy es el pueblo de Valsaín. Esto dio lugar a la construcción de un Pabellón, donde se sabe estuvo por lo menos cuatro veces el emperador Carlos V (de 1525 a 1542). Fue Felipe ¡¡,como todos sabemos, el que el 3 de julio de 1552 comenzó a construir un palacio como lugar de descanso y recreo de los Reyes, hasta 1686, año en que se produjo el incendio, lo que motivó a Felipe V la construcción de otro palacio más ambicioso, el de La Granja de San IIdefonso.

Pero no es a ese período histórico al que aquí ahora queremos referirnos, sino más bien al siguiente en el que aparece "la fundación" de la parroquia de Valsaín.

Según las crónicas, en 1756 fue proclamada LA VIRGEN DEL ROSARIO PATRONA DE VALSAÍN. Y fue también entonces cuando "se reunieron los vecinos de la localidad con el fin de solicitar de las Autoridades Eclesiásticas el permiso necesario para fundar una HERMANDAD compuesta de uno y otro sexo". La autorización llegó de Roma ese mismo año (1756) y así quedó constituida "LA REAL HERMANDAD DE NUESTRA SEÑORA DEL ROSARIO DE VALSAIN", compuesta por personas de uno y otro sexo y dirigida por una JUNTA (DIRECTIVA), cuyos componentes son el cura párroco, los Mayordomos, el Secretario y el Tesorero.

La imagen de la Virgen del Rosario fue esculpida por LUIS SALVADOR CARMONA entre 1758 y 1760. Desde entonces, ELLA preside y vela toda la vida y actividad de sus hijos de Valsain. !Cuántos bautizos celebrados ante su imagen!, !Cuántas Primeras Comuniones!, !Cuántas bodas!, !Cuántas defunciones!, (Cuántas Fiestas Patronales!... Por eso podemos decir que en la historia del pueblo de Valsaín Ella ocupa un lugar único, muy importante.

Sabemos que un pueblo crece y mantiene su identidad como pueblo en la medida en que vive y transmite unos valores, unas costumbres sanas; una TRADICIÓN, en definitiva, que le ha ido haciendo y uniendo de generación en generación. En ese proceso histórico, la dimensión RELIGIOSA es esencial. Es como "el alma" del pueblo, es decir, lo que en el fondo alimenta y da sentido ala manera, propia o peculiar, de ser y de actuar, de trabajar y divertirse, de vivir y morir, de amarse y unirse... los hijos, los vecinos de ese pueblo; en este caso, de nuestro pueblo de Valsaín.

¿Qué sería de Valsaín sin "su" Virgen del Rosario? ¿No es Ella la que, en realidad, nos convoca, nos une, nos lleva a celebrar "Sus" Fiestas, con tanta alegría y devoción? ¿No es Ella la que "con amor materno cuida de los hermanos de su Hijo que todavía peregrinamos y, a veces, nos hallamos en peligros y ansiedades"? No es a Ella a la que nuestros antepasados invocaron y ala que seguimos invocando y amando ahora nosotros?

Juan Pedro Cubero (Párroco de Valsaín).